Remember, “the forget”:/dat1.0

Las cosas por mi mente han estado nebulosas e indescifrables, la duda acrecienta y cada vez doy pasos menos seguros de estar pisando la berma. El tiempo a estado a mi favor, el frió y la oscuridad hacen de mi alguien mas activo y alegórico, pero para otros es simplemente el infierno, la aparición de sus peores miedos y las caídas en la depresión tal cual el inevitable camino de las gotas de la lluvia es el suelo. Pero como dicen en algunos lados, la basura de unos es el tesoro de otros y viceversa, esto es aplicable a toda situación, como la del clima. Aun por lo antes mencionado un vació inexplicable destruye la belleza de aquellos instantes y me hace capacitar sobre que había ahí antes. Pensar ya no puedo, estoy infectado de alguna repugnante enfermedad respiratoria, que en particular, me afecta muy gravemente independiente de lo que sea, este tipo de situaciones me refriegan en la cara mi peor defecto físico, un asma que acarreo de tiempo, provocada por algún virus que me daño invierno tras invierno cuando era mas pequeño. Ahora solo me acuerdo de está en las situaciones críticas que llevan a mi límite, mi resistencia y paciencia. Presente la sensación de ahogo, regresan a mi, desagradables recuerdos, pero también, tales como los mejores que guardo con recelo. Las mascarillas de gas, los cables en mi pecho y el deseo de que esa noche sea la última, pero, grandes sucesos me han sido vinculados ante el evidente desequilibrio. Esto prueba un tanto lo que mencione antes, el asunto de las victorias y derrotas, siento que aquí se me aplico, y que hizo su trabajo.
Volviendo a lo actual, estaba ahí, sentado nuevamente en mi PC, revisaba unos últimos video clips que había bajado y que disponía a escuchar, mientras el tiempo transcurría, los malestares se denotaban mas y mas, pero suena la alarma de mi celular indicándome que era tiempo de marchar a compromisos. Tomo mis cosas y también la micro. En el viaje siento que no voy a llegar al final de mi destino trazado, pero veía el paradero al cual debía bajar, me paro y pongo mi pulgar en el timbre, vacilo y desisto de intentar de luchar conmigo mismo, me siento nuevamente a esperar a sentirme listo para bajar. Finalmente toco el timbre y bajo inconciente de por que había escogido ese lugar. De tener que llegar al paradero 23 de la gran avenida, estaba parado frente al rió mapocho. La emoción recorre mis venas, siento muchas ganas de saber que era lo que me había traído. El frió pasa por mi cara y cesan las ganas de toser, ya no hay fiebre, mi alma ha regresado guiada por los vientos. Mientras me siento bien decido aprovechar de haber llegado tan lejos y camino sin destino clandestino. Pronto comprendía la causa de mi visita, el vació tenia que ser llenado con libertad y risas que acrecentaban a cada paso que daba. Providencia, los cerros san Cristóbal y santa Lucia, mapocho y varios, habían sido escenario de mis más grandes locuras e intereses, cada lugar, una historia, una risa y una burla inevitable a mi mismo. Parecía un tanto loco hablando solo y riendo por ahí, pero era lo mió y no estaba interesado en disimularlo. Satisfecho de la decisión tomada, quizás por mi subconsciente, finalizo con unas galletas de COOKIE MAN y la compra de un boleto de metro, las dos cosas grandes enseñanzas de mi hermano. La noche y la vuelta de mis síntomas indicaban mi partida a casa…
…..continuara…